viernes, septiembre 10, 2021

La estrella de Venus

 Muchos miran el atardecer, el momento en el que el sol desaparece en medio del horizonte se vuelve un show al que algunos tienen el privilegio de acudir. Pero desde hace unos meses ella tiene un espectáculo privado justo después, cuando la oscuridad comienza a invadirlo todo. 

Es la hora en la que entran los mosquitos a casa, la hora en la que los murciélagos comienzan a volar de un lado a otro, la hora en la que ella cierra la puerta de la entrada de casa y justo en ese momento suele asomarse por el horizonte la primera estrella de la noche, la estrella de Venus. Pero ella no la conocía. 

La primera vez que se dio cuenta de ello se quedó mirando y admirando esa estrella, brilla con una intensidad tan especial, se dijo. Cuál será? Quién eres? preguntó, suspiró y cerró la puerta. 

Tiempo después alguien le recordó que antes de llegar a esta tierra había ido a Venus, había ido a aprender una vez más sobre la esencia femenina. Cuando lo escuchó algo conectó dentro de ella y vino a su mente la estrella, esa estrella brillante que aparece siempre frente a su puerta justo después del atardecer. Supo que era Venus, lo supo con su corazón, lo supo con sus memorias, las que no recuerda pero que están ahí, recorriéndole el cuerpo, su cuerpo de mujer. 

Y un día tomó su celular, abrió una aplicación y confirmo que era ella, que era Venus, pensó entonces que cuando la miraba y se quedaba asombrada era como si mirara su hogar, como cuando se comía unos tacos o cuando le hablaban de lugares de la Ciudad de México. Miraba el hogar donde había estado y había aprendido todo lo que necesitaba para ser la mujer que es hoy. Mhhhm, eso se sentía como un recordatorio, como un abrazo, como si desde lejos le dijeran "Recuerda todo lo que aprendiste". 

Tal vez sí, tal vez no, tal vez sólo sea una historia post atardecer que se repite continuamente. Tal vez la magia está más presente de lo que podemos aceptar. Da igual, miremos la estrella de Venus, suspiremos y cerremos la puerta.