martes, mayo 11, 2010

Pensar en ellas

En la mente de Rocío no había otra cosa que las imágenes de aquel temblor, el que estuvo en sus sueños, el que vivio tan real durante la noche anterior.
-Qué demonios es esto- había preguntado mientras veía derrumbarse el techo. Recordaba que estaba en su trabajo, pensaba de manera inmediatas en lo que aquel sismo habría provocado en la plataforma de producción y había sentido la cama voladora y el concurso de brincos en el que participaba el edificio.
-No crees Chío- escuchó a lo lejos. Sacudió su cabeza, abrió los ojos y se dio cuenta que iba en el camión. Junto a ella Sergio, su compañero de trabajo.
Apenas despertaba del sueño revivido, él hablaba de que no quería comprarse un coche, de que había visto un celular poka madre de 12 megapixeles, de que no quería hablar con su novia y de otros 35 temas más que a Rocío no le interesaban en lo absoluto.
Cada día era así, él hablaba y hablaba, ella escuchaba y a veces se perdía en sus propios pensamientos. Lo soportaba porque iba por su rumbo y salir del trabajo a las 23:00 horas sola para tomas el camión no era nada agradable.
-Me estabas escuchando- inquirió él
-Perdón, ando algo adormilada, tuve un sueño terrible y no dormí bien- respondió ella
- Ahh, vaya, pero como ves, me compro el cel? porque la neta es una joya...
-Sergio, te la pasas encerrado en la oficina, haces cuentas, revisas números, cifras y odias que te tomen fotos, no tienes familia y el cel que tienes ahora tiene 8 megapixeles, has sacado tres fotos, tienes internet ilimitado y lo ocupas para twittear en el camino casa-trabajo y viceversa, para que te qieres comprar otro cel.
-Ehhh... nos vemos mañana, bajo en esta. Ciao
Era intolerante a la crítica y comprador compulsivo de artículos de nueva tecnología, le moslestaba infinitamente que Rocío hiciera eso, pero muy en el fondo por eso platicaba con ella, porque le contestaba con tanto desdén que lo hacía darse cuenta de que había muchas cosas más importantes, incluso para simplemente pensar en ellas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡ups! el 98 por ciento de los hombres que lean tu post, se sentirán ofendidos, agraviados, aludidos. Se pondrán, nos pondremos, el saco.
el fondo del texto es duro, pero prefiero quedarme en la superfice, en lo divertido que es verse retratado.

Yasabesquien.