Amor no es pasión, pasión no es amor, pero encontrar ambos en la misma persona es la gloria. dice mi querido amigo El Katib, la verdad es que yo insisto en que uno nunca elige por quién apasionarse, esa cuestión es básicamente de identificación, cuando encuentras alguien por quien te apasionas, alguien que te roba el sueño, que te tiene apendejado, que te hace comenter una y mil locuras, alguien de quien esperas una llamada, por quien sientes celos, alguien que te hace sentirte pleno, libre, pero a la vez suyo... eso es pasión, ese querer estar todo el tiempo con él o ella.
Apasionarse es estar de tiempo completo, es sentir en el cuerpo es afuerza externa que te lleva a ser poeta y a comenter locuras, una pasión es un privilegio de aquellos que no tienen nada que hacer, al menos eso dice Oscar Wilde, yo lo creo y no. Hay pasiones, por ejemplo aquellas cuyo objeto es alguien a quien no queremos dejar ir, que requieren teimpo, díganme si no, yo por eso busqué hacer prácticas profesionales, porque no quería dejar ir a mi ex novio, porque no entendía la razón de que me hubiera dejado, yo que lo amaba con verdadera devoción, que le daba ahsta el último segundo posible, no comprendía la razón por la que se iba de mi vida, así que decidí ocupar el tiempo que pasaba con él y me desarrolle profesionalmente.
Pero hay pasiones que requieren el tiempo necesario, que se cocinan por tiempos pequeños, que se dosifican, también viví una que a veces aun recuerdo, pero que por ambas partes decidimos romper por nuestro bien, no hubo rencores, no hubo peleas, tampoco reconciliación, simplemente se acabó.
Decía mi amigo que es verdaderamente del carajo "que tu quieres a esa persona, la quieres bien, pero no para ti. Y lo del carajo es que sabes que has estado buscando a alguien que te quiera así, con esa intensidad, con esa devoción. Que te vea y se le caigan los calzones. Eso querías con tu otra u otras parejas y ahora que lo tienes... no te interesa".
Es cierto, a veces ocurre que no encontramos la pasión por la misma persona que queremos, que no hay locura, deseo, imaginación, hay veces que no deseas estar todo el tiempo con esa persona, es como la dualidad del cuerpo y el alma, así también es la dualidad del amor y la pasión. La decisión siempre está en nosotros, decidir si intentar apasionarte por esa persona o decidir darte la vuelta y olvidar que hay alguien que te quiere como tú quieres que te quieran, aunque no sea la persona que tú quieres, pero te quiere tanto...
Aun así, hay un consuelo... cada 139 sapos encuentras un príncipe. Y el amor es eterno mientras dura...
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