jueves, noviembre 08, 2007

Gloria...divina gloria

¿Haz probado el sabor de la gloria? Yo sí, lo degusté hoy con una sola palabra tuya, una, pero dirigida para mí y sin que nadie más lo supiera, la misma gloria que sintió Arnaud cuando descubrió que se había curado del escorbuto por los cocos, la misma gloria de Alicia cuando por fin desembarcó de la Isla de la Pasión aunque no fuera con su marido, es la misma gloria que siente el agonizante cuando pide su último vaso de agua , la misma que siente el periodista cuando ve que ha encontrado una buena nota, la misma que siente una niña pequeña que lloriquea por una paleta de hielo aunque le duela la garganta y la degusta finalmente cuando su madre se la compra, es la misma gloria que siente un pequeño cuando ve que los Reyes Magos le trajeron lo que pidió.
La gloria viene como la muerte, cuando uno menos la espera. La descubro en tus caricias, en tus palabras, en tu voz, con eso soy inmensamente feliz. Hoy me acompañaste en el camino de Dvo. 18 de marzo a mi casa, todo mundo nos miro sabes, escucho cuando yo te decía "abrázame, apriétame, acariciame y bésame" y tú gritabas que del mar de mi cuerpo querías beber hasta la última gota de amor y placer, bailamos un poco, bueno, lo acepto, bailamos todo el camino, pero esque estar contigo aunque sea en mi mente es tan fabuloso que no puedo evitarlo, tengo un poco de ti y pido más y más, no puedo conformarme, pero una sola palabra tiene tanto alcance que aún cuando no la escuche de tu boca tiene efecto en mi mente por horas, quizá por días, es el sabor de la gloria, la gloria viene contigo cada vez que te beso, cada vez que siquiera te miro auqnue no acierte a saber tu reacción, la gloria es eso que tú y yo alcanzamos cuando estamos juntos...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tu voz amorosa suena tan nítida e inocente que hasta los corazones sordos por los desengaños vuelven a escuchar música olvidada.