martes, junio 16, 2020

Querida persona sin COVID

En algún momento de la vida llamarán a tu teléfono, puede que detrás haya una voz agitada, nerviosa, tensa, angustiada... te dirá que tiene COVID, o que alguien a quien amas tiene COVID. Puede que esa persona esté grave o que sólo tenga síntomas graves. 

La primera reacción de tu cuerpo será un hueco en la boca del estómago, una angustia inexplicable, tu mente comenzará a hacer mil conjeturas, vendrán a tu mente todas las cifras que has escuchado en las noticias, una sensación de querer vomitar estará presente en tu garganta mientras tratas de tranquilizarte y pasas saliva... tratarás de respirar, pero las emociones saldrán sin pedir permiso, querrás llorar o llorarás si te lo permites... tus primeros pensamientos pensarán que le quedan pocas horas de vida, o que hay que moverse rápido para que no ocurra algo trágico... tu respiración comenzará a agitarse... Querrás con todas tus fuerzas gritar y te cuestionarás porqué, por qué a ti, por qué a esa persona que amas... 

Dependiendo de las heridas emocionales que tengas tu mente volará por lugares obscuros, tal vez se haga presente la culpa, tal vez el arrepentimiento, tal vez no tengas tiempo para pensar nada, sólo para llorar... No sabrás qué hacer, no sabrás como calmar esa energía que entró en tu cuerpo y en tu vida, ese temblor angustioso que no se calma... preguntarás qué pasó, cómo, por qué... 

Si estás sólo es posible que todo en tu mente se vuelva un caos, en algún momento tu mente tendrá que parar. Más tarde o más rápido, pero tu mente tendrá que aterrizar, tendrá que detenerse... Comenzarás a buscar información en internet, pero las noticias que aparecerán serán las relacionadas con la política, con las tragedias y con las muertes... la mayoría de las noticias cuando pongas en google "qué hacer si tengo COVID?" te repetirán lo que ya has escuchado, cubrebocas, mira tus síntomas, mantente pendiente de la temperatura, aíslate de las personas con las que vives...   pero nada de eso te dejará saber los indicadores que te digan si estás bien o si todo se está yendo al carajo. 

En ese momento nada de lo que hayas escuchado en las mañaneras te hará sentirte tranquilo, nada te servirá para calmar la ansiedad, la tristeza, la angustia... Quizá pase por tu mente un hospital particular, tendrás duda de los hospitales públicos, querrás buscar información, pero nuevamente todo lo que aparezca te hablará de las muertes, de la saturación, de los contagios masivos, de los riesgos...

Respira, por favor respira... oxigena tu mente. Deja tus emociones fluir, deja correr en paralelo estos mundos que están dentro de ti, el físico, el mental y el emocional. Tienen el mismo peso en tu vida, aunque a veces le queramos dar más valor a uno de ellos. Esta pandemia es una invitación a equilibrarlos, a equilibrarte. 

Debes saber depurar la información que vas a encontrar, saber qué es lo que buscas. Mientras más específico seas, más fácil encontrarás las respuestas. El problema es cuando no sabes. Organiza en tu mente tu red de apoyo... quién te puede dar información-orientación médica, quién te puede ayudar a saber a dónde ir o qué hospitales están abiertos, quien puede apoyarte en contenerte emocionalmente... 

Si no sabes cómo funciona la enfermedad en realidad, escríbele a un doctor que conozcas, alguien a quien le tengas confianza... Existen dos valores importantes de saber cuando alguien tiene COVID, la temperatura y el nivel de oxigenación de la sangre (el aparato que lo mide se llama oxímetro y el nivel debes tenerlo en más de 90)... Cualquier persona que pase en su casa esta enfermedad debería tener claro cómo se van moviendo estos valores en su día... 

Si pierdes el sentido del olfato y el gusto, es seguro que tienes COVID. Si eres una persona con hábitos sanos tu cuerpo no tendrá tantas complicaciones, pero si tienes algún otro padecimiento, particularmente si fumas o tus pulmones están comprometidos por alguna otra enfermedad, entonces es posible que presentes neumonía. Entonces con más razón mide tus valores de temperatura y oxigenación de la sangre y mantente con la asesoría de un médico. Debes tomar un antibiótico que el médico te receta y si tus pulmones están muy dañados y no pueden hacer el trabajo de respiración, entonces requerirán entubarte y conectarte un respirador artificial, esos que todo mundo (literalmente) se está peleando. 

Seguramente después de esto tendrás que tomar decisiones, otras acciones, la incertidumbre estará presente a cada instante porque ante esos momentos sólo queda la fe y estar bien emocionalmente contigo, todo lo demás puede fallar o no funcionar incluso estando en el mejor hospital del mundo. 

Si lees esto y requieres apoyo emocional, escríbeme. Sé que este proceso no será sencillo, pero sé que quiere invitarte a mirar aquello que en el sistema familiar ya no está funcionando para la nueva era. Así que miremos, yo te contengo. 

Espero que este viaje tuyo y de tus seres amados los lleve a buen puerto. Este momento es suyo. Sigamos echando raíces aún desde el cielo. 





1 comentario:

CoVida66 dijo...

Wowwww wowwwwwb�������������������� Neta eres un Ángel mi Coach hermosa, las letras son tus Alas con las que a tu lado podemos Volar, doy gracias a la Vida por tu Existencia . NAMASTÉ ❤️